domingo, 10 de junio de 2012

Guanajuato y San Miguel de Allende

Hace unos años atrás tuve la oportunidad de viajar a México. En ese primer viaje conocí la hermosa ciudad de México, pero no tuve tiempo de recorrer otros puntos del país. En ese mismo viaje me entere acerca de otras ciudades mexicanas muy turísticas y conocidas, pero no había tenido tiempo de realizar excursiones a estos lugares. Como me había quedado con las ganas de conocer más de este país, decidí programar un nuevo viaje, esta vez evitando ir a la capital. Simplemente quería recorrer otros puntos turísticos y no perder el tiempo viendo algo que ya conocía. Como la mayoría de los vuelos a este país tienen como destino a la capital, decidí buscar hoteles en el aeropuerto de Ciudad de México y así pasar la primer noche allí, y dirigirme a San Miguel Allende lo más rápido posible. San Miguel es una ciudad que posee innumerables templos. Los principales sitios turísticos son: la Parroquia de San Miguel Arcángel, que como su nombre lo indica es el verdadero símbolo de la ciudad. Personalmente el lugar que mas me gusto de la ciudad fue el Templo de San Francisco de Asís que data del siglo XVII, con elementos barrocos y neoclásico, el Museo Histórico Casa de Allende, el Teatro Ángela Peralta, Paseo del Chorro, el Mercado de Artesanía, son los lugares de visita obligada. Nuestro paseo por esta ciudad fue un verdadero placer, la recorríamos mientras pensábamos en nuestro próximo destino que sería la ciudad de Guanajuato. Debido a la corta distancia que existe entre San Miguel y Guanajuato decidimos realizar el viaje en ómnibus. Esta ciudad realmente me impacto mucho. Sus callecitas, sus colores, sus subidas y bajadas, hacen que se parezca a las ciudades medievales europeas. A pesar de este parecido, esta ciudad también contiene características autóctonas que mezcladas con su herencia europea la hacen única. En fin esta ciudad fue la que más me gusto y me hizo recordar mucho a Toledo España, por algo son ciudades hermanas.